El microondas es uno de los electrodomésticos
más utilizados en nuestras cocinas. Nos facilita la tarea de
calentar y descongelar alimentos de manera rápida y sencilla. Sin
embargo, hay un gesto que la mayoría de las
personas no realiza y que puede resultar muy beneficioso: dejar la
puerta del microondas abierta durante unos minutos después de
usarlo. Seguidamente, descubriremos por qué es necesario hacerlo y
cuáles son los beneficios que esto conlleva.
El problema de
la humedad en el microondas
A diferencia de un horno convencional, el microondas no
calienta realmente el aire que lo rodea. Sin embargo,
durante su funcionamiento, se genera humedad
debido a la evaporación de los alimentos. Esta humedad es
normalmente eliminada por un ventilador interno. Sin embargo, con
el tiempo, se pueden acumular polvo y grasa en el sistema de
ventilación, lo que podría afectar su eficacia. Dejar la puerta del
microondas abierta después de su uso permite que esta humedad se
disipe de manera natural y evita posibles
problemas de mal funcionamiento debido a la acumulación de
humedad.

Evita malos olores en
el microondas
Otro problema común asociado al uso del microondas es la
aparición de malos olores. Cuando calentamos
alimentos, especialmente aquellos con alto contenido de agua, se
liberan olores que pueden impregnar el interior del microondas. Si
cerramos la puerta inmediatamente después de su uso, estos olores
quedan atrapados y se intensifican la próxima vez
que abrimos el microondas. Dejar la puerta abierta durante unos
minutos permite que los olores se disipen y evita que se acumulen
en el interior del aparato.

Técnicas
caseras para eliminar los malos olores del microondas
Si ya tienes
malos olores en el microondas, existen algunas técnicas caseras
que puedes utilizar para eliminarlos de manera efectiva. Aquí te
presentamos tres opciones:
Dentífrico: sí, has leído bien. Aplicar un poco
de dentífrico en las paredes y el plato del
microondas puede ayudar a eliminar los malos olores. Deja
actuar durante unos minutos y luego limpia con un paño húmedo. El
dentífrico actúa como desodorante y deja tu microondas oliendo
fresco.
Vinagre: el vinagre es conocido por sus
propiedades desodorantes y desinfectantes. Mezcla
una parte de vinagre blanco con una parte de agua y coloca la
solución en un pulverizador. Rocía el interior del microondas y
deja actuar durante unos minutos. Luego, limpia con un paño húmedo.
Si no te gusta el olor del vinagre, puedes añadir cáscaras
de cítricos a la solución para darle un aroma
agradable.
Limón: el limón es otro desodorante
natural muy efectivo. Exprime el jugo de medio limón en un
recipiente apto para microondas y añade un poco de agua. Pon el
recipiente en el microondas a máxima potencia durante dos minutos.
La mezcla liberará vapores de
limón que ayudarán a eliminar los olores. Luego, limpia con un
paño húmedo.
Estas técnicas caseras son sencillas y eficaces
para eliminar los malos olores del microondas. Sin embargo,
prevenir la acumulación de olores es aún mejor, por lo que es
recomendable dejar la puerta abierta después de cada uso.
Consejos adicionales para mantener tu microondas limpio y
sin olores
Además de dejar la puerta abierta después de usar el microondas,
hay otras medidas que puedes tomar para mantenerlo limpio y sin
olores:
-
Cubre los alimentos
antes de calentarlos para evitar salpicaduras en el interior del
microondas. -
Limpia el microondas
regularmente con un paño húmedo y un poco de detergente
suave. -
Evita utilizar recipientes de
plástico o papel de aluminio en el microondas, ya que
pueden desprender sustancias químicas o causar chispas. -
No calientes recipientes
vacíos en el microondas, ya que esto puede dañar el
aparato. -
Siempre sigue las instrucciones
del fabricante para un uso seguro y adecuado del
microondas.
Siguiendo estos consejos, mantendrás tu microondas limpio, sin
olores y en buen estado de funcionamiento durante mucho tiempo.



