Distrito Nacional, República Dominicana — Las autoridades presentaron este jueves una solicitud de prisión preventiva contra Jean Andrés Pumarol Fernández, tras el suceso ocurrido el pasado 23 de julio en el condominio Dorado IV, ubicado en el Ensanche Naco, que dejó una persona sin vida y cinco más lesionadas.
El expediente acusatorio fue entregado al Ministerio Público luego de que la Policía Nacional confirmara la remisión oficial del caso. Mientras tanto, el imputado permanece bajo custodia médica en un centro de salud del Distrito Nacional, a la espera de evaluaciones que forman parte del proceso legal.
La víctima que dejó de vivir fue identificada como Ivonne Handal Abugabil, de 70 años, quien ya fue sepultada en medio de un ambiente de consternación. Entre los heridos se encuentran Guillermo Pumarol, padre del acusado; Francisco Texano; Teresa Fabián Heredia; Griselda Ozuna; y Victoria Heredia.
Según el informe preliminar de las autoridades, el joven habría recorrido el edificio tocando las puertas de los apartamentos, portando un afilado. El hecho ha causado un profundo impacto en la comunidad, por su desarrollo inesperado y la cantidad de personas afectadas.
El Ministerio de Salud Pública, a través de su titular Víctor Atallah, confirmó que dos de las víctimas permanecen en estado delicado. “Hay una que tiene unas cuantas heridas serias… hay dos de ellas que tienen una condición de gravedad”, explicó, tras visitar a las pacientes.
Por su parte, la familia del implicado emitió un comunicado en el que revelaron que Jean Andrés ha vivido durante años con un diagnóstico psiquiátrico, bajo tratamiento y seguimiento profesional continuo. Según la nota, esto le había permitido mantener una vida funcional por más de una década.
“Como aspiran tantas familias que acompañan a un ser querido en circunstancias similares”, señalaron, al referirse al manejo de condiciones de salud mental dentro del entorno familiar.
La presentación formal de cargos abre una nueva etapa en el proceso judicial, enfocada en establecer las responsabilidades correspondientes. El Ministerio Público contará con evidencia sustentada en testimonios, registros clínicos y videos de seguridad del lugar donde ocurrieron los hechos.
Este caso ha reactivado el debate sobre la atención a personas con condiciones mentales y la seguridad en residenciales urbanos. La comunidad del Ensanche Naco, conocida por su tranquilidad, enfrenta ahora las repercusiones de un hecho que ha conmocionado tanto a residentes como a la sociedad en general.
