Las preocupaciones económicas podrían tener una función central. Cerca de 8 de cada 10 adultos AAPI esperan que las políticas arancelarias de Trump aumenten el costo de los bienes de consumo, según la encuesta, mientras que solo alrededor de 4 de cada 10 piensan que esas políticas impulsarán la fabricación nacional y únicamente 2 de cada 10 prevén más empleos en Estados Unidos como resultado.
“Me parece que están ocurriendo muchas cosas que no están realmente bien pensadas”, señaló Michael Ida, un independiente de 56 años de Hawai que enseña cálculo avanzado en una escuela secundaria. “En el proceso, hay muchos daños colaterales y consecuencias que perjudican a mucha gente”. Ida se refería específicamente a los recortes de gastos del gobierno, incluidos los de educación.
Los adultos AAPI representan un pequeño segmento de la población de Estados Unidos, y en 2023, constituían apenas cerca del 7% de los residentes del país, según un análisis de datos gubernamentales realizado por el Centro de Investigación Pew. Asimismo, en general, difícilmente son un bloque de votantes a favor de Trump. En las elecciones del año pasado, los votantes estadounidenses de origen asiático que hablan inglés se inclinaron ligeramente hacia Trump, pero solo alrededor de un tercio lo apoyó, frente al 29% en 2020, según AP VoteCast, una encuesta del electorado estadounidense realizada en los 50 estados del país.
La nueva encuesta también sugiere que es especialmente probable que a este grupo le preocupe la trayectoria de la economía y se sienta nervioso por los altos costos.
Cerca de dos tercios de los adultos AAPI, equivalente al 65%, dicen estar “extremadamente” o “muy” preocupados por la posibilidad de que la economía de Estados Unidos entre en recesión, más que el 53% de los estadounidenses en general que dijeron lo mismo en una encuesta de AP-NORC realizada en abril.
“En cuanto a la economía, vimos que los votantes AAPI se inclinaron, no de manera significativa, pero se inclinaron de todos modos, a favor de Trump” en las elecciones de 2024, señaló Karthick Ramakrishnan, director ejecutivo de AAPI Data e investigador de la Universidad de California, Berkeley. “No ven que se materialicen grandes beneficios económicos. Por el contrario, prevén grandes riesgos económicos en el horizonte con base en las medidas de Trump sobre los aranceles”.
Shopan Hafiz, un independiente de 39 años e ingeniero de Intel en Oregón, describió su visión de Trump como “muy desfavorable” y lamentó la política arancelaria del presidente, que afectará más a los consumidores estadounidenses en los próximos meses, según prevé.
“Con todos los aranceles, no creo que vaya a ayudar”, dijo Hafiz. “Todos los aranceles los pagarán, en última instancia, los ciudadanos estadounidenses, y la inflación va a empeorar”.
La encuesta se produce en medio de las amenazas intermitentes de Trump de imponer aranceles con el objetivo, según él, de resolver el desequilibrio comercial del país. La inflación aumentó en junio a su nivel más alto desde febrero, ya que los aranceles de Trump elevaron el costo de los bienes del hogar, desde comestibles hasta electrodomésticos.
Los precios al consumidor aumentaron un 2,7% en junio en comparación con el año anterior, informó la semana pasada el Departamento de Trabajo, un aumento respecto al incremento anual del 2,4% en mayo. En términos mensuales, los precios subieron un 0,3% de mayo a junio, después de aumentar solo un 0,1% el mes anterior.
Al igual que Hafiz, Ida, el profesor de Hawai, no votó por Trump el año pasado. En su lugar, ambos votaron por el candidato del Partido Libertario, Chase Oliver. La decisión de Hafiz fue en oposición al apoyo de los dos principales partidos de Estados Unidos a Israel en su guerra en Gaza. Ida dijo que los dos partidos principales se habían vuelto “demasiado extremos”.
Ida es parte de los aproximadamente dos tercios de adultos AAPI que dicen estar al menos “muy preocupados” por el costo de los comestibles. Ha notado el temor al aumento de precios en su estado insular del Pacífico, y aún más en los negocios étnicos, a la luz de la dependencia de Hawai de los bienes transportados.
“Aquí en Hawai, debido a que estamos tan aislados, todo llega en barco o en avión”, dijo. “Somos especialmente vulnerables a los aumentos de precios y las interrupciones en la cadena de suministro. Definitivamente hay algo de nerviosismo”.a