#Salud: Descubre los beneficios de comer canónigos por la noche

Los canónigos, también conocidos como hierba de los
canónigos, son unas pequeñas hojas verdes que aportan un
sabor suave y una textura crujiente a diversas preparaciones
culinarias. Originarios de Europa, estos vegetales se han ganado un
lugar privilegiado en la dieta mediterránea gracias a sus múltiples
beneficios para la salud. Aunque son comúnmente consumidos en
ensaladas, su inclusión en la cena puede ofrecer ventajas
adicionales que a menudo pasan desapercibidas.

Propiedades
nutricionales de los canónigos

Los canónigos son un verdadero tesoro
nutricional. Con un bajo contenido calórico,
son ideales para quienes buscan mantener una dieta equilibrada.
Cada 100 gramos de canónigos contiene:

Estas cifras destacan la riqueza en vitaminas y
minerales que ofrecen, lo que los convierte en un
complemento ideal para cualquier comida, especialmente durante la
noche.

Por otro lado, los canónigos son ricos en vitaminas A, C
y E, que son antioxidantes naturales. Estas vitaminas
ayudan a combatir el daño celular y fortalecen el sistema
inmunológico. Además, su contenido de ácido fólico
es particularmente beneficioso para las mujeres embarazadas, ya que
previene malformaciones en el feto.

Con solo 21 calorías por cada 100 gramos, los canónigos son
perfectos para quienes desean disfrutar de una cena ligera sin
sacrificar nutrientes. Su bajo contenido calórico permite que se
integren fácilmente en diversas recetas, desde
ensaladas hasta guisos.

Beneficios
de consumir canónigos por la noche

Promueven un sueño reparador: los canónigos
contienen compuestos que pueden ayudar a relajar el sistema
nervioso. Esto es especialmente útil si tienes problemas para
dormir. Su relación con la valeriana, una planta conocida por sus
propiedades sedantes, sugiere que pueden facilitar un descanso más
profundo y reparador.

Ayudan a combatir la ansiedad: la ansiedad
puede ser un obstáculo para disfrutar de una buena noche de sueño.
Consumir canónigos por la noche puede ser beneficioso, ya que su
contenido de ácido fólico y otros nutrientes
contribuyen a la regulación del estado de ánimo y la reducción del
estrés.

Aportan hierro y previenen la anemia: el hierro
es un mineral esencial que ayuda en la producción de glóbulos
rojos. Incluir canónigos en la cena puede ser una forma efectiva de
aumentar la ingesta de hierro, especialmente para aquellas personas
que sufren de anemia ferropénica.

Favorecen la digestión: los canónigos son ricos
en fibra, lo que los convierte en un aliado para una buena
digestión. Consumirlos por la noche puede ayudar a regular el
tránsito intestinal y evitar problemas como el estreñimiento.

¿Cómo
incorporar canónigos en tus cenas?

Incluir canónigos en tu dieta nocturna es sencillo y versátil.
Aquí te ofrecemos algunas ideas creativas para
disfrutar de este alimento.

En ensaladas frescas

Una de las formas más populares de consumir canónigos es en
ensaladas. Puedes
combinarlos con ingredientes como:

Tomates cherry: aportan dulzura y color.

Aguacate: añade cremosidad y grasas
saludables.

Nueces: proporcionan un crujido adicional y
omega-3.

Como acompañamiento: los canónigos también
pueden servir como acompañamiento para platos principales. Prueba a
saltearlos ligeramente con ajo y aceite de oliva para realzar su
sabor.

En salsas y aderezos: si prefieres no
consumirlos crudos, puedes hacer un aderezo verde. Tritura los
canónigos con aceite de oliva, limón y un poco de sal para obtener
una salsa deliciosa que puedes usar en carnes o pescados.

En pizzas y quiches: los canónigos son un
excelente complemento para pizzas y quiches. Añádelos al final de
la cocción para conservar su textura crujiente.

Consideraciones
al comprar y almacenar canónigos

Para disfrutar de los beneficios de los canónigos, es esencial
elegir las mejores opciones, busca hojas que sean verdes y
frescas, ya que esto evita aquellas que tengan manchas o
estén marchitas. Por otra parte, busca que las hojas sean firmes al
tacto.

Para mantener su frescura, guárdalos en el
refrigerador. Colócalos en un recipiente con papel de
cocina para absorber la humedad y evitar que se pongan lacias.
Recuerda que su vida útil es corta, así que consúmelos en un plazo
de 2 a 3 días.

Contraindicaciones y
precauciones

Aunque los canónigos son generalmente seguros para el consumo,
hay algunas consideraciones a tener en cuenta, ya que algunas
personas pueden ser alérgicas. Si experimentas
reacciones adversas después de consumirlos, es recomendable
consultar a un médico.

Además, si estás tomando anticoagulantes,
consulta a tu médico antes de
incorporar grandes cantidades de canónigos en tu dieta, ya que su
contenido de vitamina K puede interferir con estos
medicamentos.