La anticoncepción de emergencia es uno de los recursos
más buscados cuando ocurre una relación sexual sin
protección, un “accidente” con el condón o un olvido en la pastilla
regular. Entender cuándo sí y cuándo no ayuda a tomar decisiones
informadas y evitar sorpresas.
Los anticonceptivos de emergencia, conocidos
popularmente como la pastilla del día después, se
dividen en dos tipos: hormonales y no hormonales.
Los hormonales, como el levonorgestrel y el acetato de ulipristal,
están diseñados para retrasar o evitar que ocurra la ovulación. Su
función principal es impedir que el óvulo salga del ovario, y de
esa manera, evitar que haya fecundación. Si el óvulo ya salió, el
medicamento pierde efectividad, porque no puede evitar la unión con
los espermatozoides.

Por otro lado, el DIU de cobre es un
anticonceptivo de emergencia no hormonal, que puede instalarse en
el útero hasta cinco días después de la relación y crea un ambiente
hostil para el esperma, impidiendo la fertilización e incluso
evitando que el óvulo fertilizado se implante. Es la única opción
que sigue funcionando después de la ovulación.
Tanto las pastillas como el DIU son seguros cuando se usan de
manera correcta, pero su éxito depende del momento en que se
utilicen tras la relación.
Eficacia de la anticoncepción de emergencia según el momento
del ciclo menstrual
El ciclo ovulatorio femenino es como una carrera de relevos,
donde cada etapa cuenta. El objetivo de la pastilla del día después
es detener la ovulación antes de que el óvulo salga, porque si ya
está disponible, la ventana de oportunidad se cierra rápido.
Por ejemplo, la pastilla con ulipristal o levonorgestrel
puede prevenir hasta 99% de los embarazos si se toma en
las primeras 24 horas tras la relación, pero sólo cuando la
ovulación aún no ha ocurrido. Si este proceso ya empezó, la
efectividad cae, y tras la liberación del óvulo, prácticamente
desaparece.
¿Qué ocurre si se toma la pastilla durante la ovulación?
Una vez que el óvulo se libera, la pastilla no puede
hacer nada para detenerlo, porque el cuerpo ya hizo el
“movimiento” biológico más importante del ciclo, y la pastilla
pierde su principal mecanismo de acción: evitar la ovulación. En
este punto, el medicamento ya no impide que los espermatozoides se
encuentren con el óvulo. En palabras simples, si la ovulación ya
pasó o está en marcha, la pastilla no sirve para evitar el
embarazo.
La confusión es común, pero la evidencia científica es clara:
la pastilla NO interrumpe embarazos ya formados ni evita la
implantación. Tampoco funciona cuando el óvulo ya salió
del ovario. Por eso, el tiempo importa mucho.
Factores que pueden afectar la eficacia
Existen condiciones médicas y medicamentos que bajan la
efectividad, como por ejemplo algunas medicinas para epilepsia,
VIH, infecciones o incluso suplementos como la Hierba de San Juan
interfieren con los compuestos hormonales de la pastilla. Si hay
vómito antes de que el medicamento sea absorbido,
el efecto disminuye aún más.
Las enfermedades hepáticas graves, problemas cardíacos,
antecedentes de embarazo ectópico y otras condiciones también
pueden limitar su uso o aumentar los riesgos. Además, mientras más
tardes en tomarla después de la relación, menores serán las
posibilidades de evitar un embarazo.
Alternativas cuando la ovulación ya ocurrió
El DIU de cobre es la alternativa preferida en
estos casos y su eficacia es alta incluso si la fecundación ya fue
posible, porque evita la implantación del óvulo fecundado. Además,
puede protegerte en las próximas relaciones también, haciendo una
doble función: anticoncepción de emergencia y método a largo plazo.
Muchas personas eligen esta opción por su seguridad y practicidad
después de un susto.

Consideraciones importantes sobre el uso de anticonceptivos de
emergencia
La pastilla del día después está pensada para ocasiones
puntuales, no como sustituto regular de la anticoncepción.
Si te encuentras usándola con frecuencia, es hora de conversar con
tu médico sobre otras alternativas.
Siempre toma la pastilla lo antes posible tras el incidente.
Si tienes dudas sobre tu ciclo, busca asesoría
profesional cuanto antes. Los métodos hormonales no son muy útiles
una vez que la ovulación pasó. Si hay vómitos o diarrea después de
tomar la pastilla, podrías necesitar otra dosis.
El seguimiento médico ayuda a descartar o confirmar un embarazo
y a elegir el método anticonceptivo que mejor se
adapte a tu vida y salud. Recuerda que ningún método es 100%
infalible. Si tu menstruación se retrasa más de siete días tras la
pastilla, hazte una prueba de embarazo.
Recuerda que la efectividad de los anticonceptivos de emergencia
depende completamente del momento en que se usan y que durante la
ovulación, la pastilla pierde su capacidad para evitar el embarazo
porque su función es previa a la liberación del óvulo. Si
ya ocurrió la ovulación, el DIU de cobre es la opción más
confiable.



