La andropausia es el nombre popular del proceso
por el cual los hombres experimentan una disminución paulatina en
los niveles de testosterona a partir de los 40 o
50 años. No ocurre de manera abrupta como en las mujeres, sino que
baja poco a poco, aproximadamente un 1% anual
desde los 40 años. Esta pérdida hormonal no afecta a todos de la
misma manera y no significa que la fertilidad termine de un momento
a otro.
Los cambios suelen ser silenciosos y, a veces, atribuidos a
otras causas como el estrés o el paso de los años. Pero cuando la
testosterona desciende de forma marcada, muchos hombres pueden
notar síntomas.
Síntomas
más comunes de la menopausia masculina
Los síntomas varían según cada hombre, pero hay signos claros
que suelen aparecer:
- Disminución de la libido y de la calidad
de las erecciones. - Cansancio y baja energía incluso después
de descansar bien. - Alteraciones del estado de ánimo como
irritabilidad, ansiedad o tendencias depresivas. - Pérdida de masa muscular y fuerza, junto con
aumento de grasa abdominal. - Problemas de sueño como insomnio o
dificultad para descansar de noche. - Reducción del vello corporal y cambios en
la piel.
No todos los hombres presentan todos estos síntomas ni con la
misma intensidad. Algunos los notan casi sin darse cuenta, mientras
que para otros se convierten en un problema que afecta su día a
día.
Diferencias
clave con la menopausia femenina
Comparar la
menopausia femenina con la masculina puede llevar a
confusiones. En las mujeres, el descenso de estrógenos es muy
brusco y ocurre en pocos meses o años. Eso sí marca el final de la
fertilidad. En cambio, en los hombres, la baja de testosterona es
gradual y prolongada. Pueden seguir siendo
fértiles por mucho tiempo y los síntomas, en general, se dan de
forma progresiva.
La menopausia femenina es un evento definitivo; la
andropausia, un proceso de transición más lento y menos
evidente.
Diagnóstico y pruebas
necesarias
Identificar la andropausia no siempre es fácil y muchas veces se
mezclan los síntomas con problemas propios de la edad, el estilo de
vida o enfermedades previas. El diagnóstico requiere una
evaluación médica completa, donde suelen
pedir análisis de sangre, especialmente en la mañana, para medir
los niveles de testosterona. También pueden solicitar estudios de
lípidos, función tiroidea y exámenes prostáticos.
Confirmar que el descenso de testosterona es la causa real de
los síntomas ayuda a personalizar el tratamiento y descartar otros
problemas médicos.
Mitos más comunes sobre la “menopausia” de los
hombres
El tema está lleno de ideas equivocadas:
- “Es solo una crisis de mediana edad”. Muchos asocian los
cambios con un mal momento emocional o estrés laboral, cuando la
biología realmente influye. - “Todos los hombres pasan por lo mismo”. En realidad, la
intensidad de los síntomas varía y algunos casi no notan el
cambio. - “Deja a los hombres infértiles”. Los hombres pueden seguir
produciendo espermatozoides durante muchos años, aunque en menor
cantidad o calidad. - “La terapia hormonal es peligrosa o solo para casos graves”.
Bajo control médico, la terapia de reemplazo
hormonal es segura en hombres que sí lo necesitan,
pero no todos los hombres deben tomarla.
Romper con estos mitos permite buscar ayuda a tiempo y mejorar
la salud sin temor ni vergüenza.
Tratamientos y
cambios en el estilo de vida
El tratamiento más conocido es la terapia de reemplazo
hormonal con testosterona, ya sea en cremas, inyecciones o
pastillas. Esta opción es para hombres con síntomas claros y
niveles bajísimos de la hormona, siempre bajo control estricto de
un especialista. Un seguimiento médico evita complicaciones, por
ejemplo en la próstata o el
hígado.
No todo pasa por la medicación. Los cambios en la
alimentación, el ejercicio regular y el manejo del
estrés ayudan mucho. Dormir bien, reducir el
consumo de alcohol y mantener relaciones sociales activas
marcan la diferencia en cómo se vive esta etapa.
En algunos casos, el apoyo psicológico es fundamental. La
andropausia afecta también el estado emocional. Sentirse
comprendido y acompañado ayuda a superar los retos.
¿Existe
realmente la menopausia masculina?
La andropausia sí existe, aunque es diferente de la menopausia
en las mujeres, se trata de un proceso natural del
envejecimiento. Los síntomas y el impacto varían de un
hombre a otro, pero los estudios confirman que el descenso de
testosterona afecta la calidad de vida y la salud general.
La clave está en informarse sin prejuicio,
consultar con profesionales y actuar a tiempo si aparecen
molestias. Detectar y tratar la andropausia ayuda a los hombres a
vivir más y mejor, sin miedo ni tabúes.