
James Harrison tenía pánico a las agujas. Pero la posibilidad de devolverles a los demás lo que habían hecho por él era más fuerte que cualquier miedo a un pinchazo. (Seguir leyendo…)
Te podría interesar:

James Harrison tenía pánico a las agujas. Pero la posibilidad de devolverles a los demás lo que habían hecho por él era más fuerte que cualquier miedo a un pinchazo. (Seguir leyendo…)