La lucha política entre Domingo Contreras y Carolina Mejía se centra en la alcaldía del Distrito Nacional en la República Dominicana. Ambos candidatos ya se habían enfrentado en las elecciones anteriores de 2020, con Carolina Mejía, del Partido Revolucionario Moderno (PRM), ganando con un 59.91% de los votos frente al 37.83% de Domingo Contreras, representante del Partido de la Liberación Dominicana (PLD).
Domingo Contreras, en su rol de candidato a la alcaldía, ha criticado la gestión de Carolina Mejía en varios aspectos clave para la ciudad, como el tráfico, la gestión de residuos y el drenaje. Según Contreras, ha habido un retroceso en la ciudad debido a la falta de efectividad en proyectos como las ciclovías y la ocupación de vías y aceras. También señala la falta de iluminación y de bulevares arbolados alrededor de las estaciones de transporte público, además de criticar el manejo del transporte de mercancías y la recogida de basuras en la ciudad.
Contreras propone una estrategia para mejorar la vida de los ciudadanos del Distrito Nacional, centrándose en aspectos como la construcción de un sistema de drenaje de aguas pluviales para evitar tragedias como las ocurridas en noviembre del año anterior, en las cuales fallecieron al menos 20 personas. La financiación de este proyecto, según Contreras, podría provenir de una parte del impuesto sobre bienes inmuebles.
Carolina Mejía, por otro lado, busca la reelección con el respaldo de su partido, el PRM. A pesar de su resistencia inicial a presentarse nuevamente, la situación política actual es diferente a la de 2020, con Domingo Contreras postulándose con el apoyo de una coalición opositora que incluye a Fuerza del Pueblo y el Partido Revolucionario Dominicano.
Hasta el momento, las encuestas favorecen a Carolina Mejía, pero el resultado final se conocerá tras las elecciones del 18 de febrero. Este enfrentamiento representa no solo una rivalidad política, sino también diferentes visiones y enfoques para el futuro del Distrito Nacional.