El 15 de diciembre del año 2014, las autoridades sanitarias tomaron la decisión de cerrar el Hospital William Morgan, inaugurado en 1946, para iniciar la construcción de la Ciudad Sanitaria Luis Eduardo Aybar, un megaproyecto compuesto por 13 edificaciones, incluyendo un helipuerto, donde los pacientes recibirían todas las atenciones sin necesidad de salir a otro recinto para completar sus estudios médicos.
Esta situación provocó la saturación de los hospitales de la periferia, los cuales, durante la última década brindaron el soporte médico y técnico a los miles de pacientes que cada día acudían al centro sanitario ubicado en el sector María Auxiliadora.
En ese momento se planteó como solución el traslado de los principales servicios que ofrecía el emblemático hospital a centros vecinos, explicándose así que la Unidad de Quemados Pearl F. Ort hoy opera en el Hospital Traumatológico Ney Arias Lora y que la residencia de Pediatría se llevara al Hospital Hugo Mendoza.
Igualmente, Medicina Interna fue trasladada a los hospitales Padre Billini, Salvador B. Gautier y Moscoso Puello; las áreas de Maternidad y Perinatología también al Moscoso Puello. Desde hace casi dos meses, Ginecología salió del Moscoso y retornó a su centro original con la puesta en funcionamiento hace dos días del Hospital Materno Infantil.
Poco a poco, el Aybar va recuperando el ritmo de trabajo a medida que se van inaugurando nuevas instalaciones e incorporando servicios, quedando solamente el bloque C, donde operará el Clínico Quirúrgico, que está en obras. El ministro de Viviendas y Edificaciones, Carlos Bonilla, dijo que será entregado a mediados del 2025 para una puesta en marcha del 100 % de las instalaciones de la Ciudad Sanitaria.
Asimismo, se mantienen activos el Centro de Gastroenterología, el Centro Cardio-Neuro-Oftalmológico y Trasplante (Cecanot) y el Centro de Educación Médica de Amistad Dominico – Japonesa (Cemadoja), también localizados dentro de la Ciudad Sanitaria.
El Moscoso llevó la mayor carga
Por su cercanía, en los años de construcción, alargada por nudos legales, el Hospital Francisco Moscoso Puello llevó la mayor carga.
De acuerdo con el Repositorio de Información y Estadísticas de servicios de Salud (Riess), entre el año 2019 y noviembre de 2024, en este centro de salud se atendieron 797,194 emergencias, la mayor cantidad en un hospital del Gran Santo Domingo. En este mismo período se ofrecieron 1,070,022 consultas.
Le sigue el Francisco Vicente Castro (Hospital de Boca Chica) con 510,137 emergencias y 263,217 consultas. El tercer lugar lo ocupó el Darío Contreras, contabilizando 424,707 emergencias y 552,638 consultas a especialistas.
Ocho años se necesitaron para que en la Ciudad Sanitaria se retomara el servicio de consultas externas, abriendo con 16 especialidades. En julio de 2022 quedaron habilitadas, además de las consultas, el área de Imágenes y Odontología.
Posteriormente, en este edificio Nelson Astacio se abrió el laboratorio y centro de vacunas. En 2022 allí se consultaron 8,283 pacientes; en 2023 ascendió a 85,775 y en los primeros 11 meses de 2024 subió a 147,533.
Medicina familiar, Pediatría, Neumología, Neurología y Oftalmología son las más demandadas.