Las alergias alimentarias son reacciones adversas que ocurren cuando el sistema inmunológico identifica erróneamente un alimento como una amenaza. Esto puede resultar en síntomas que varían desde leves hasta severos, e incluso pueden ser potencialmente mortales. Aunque muchas personas son conscientes de las alergias comunes como las de la leche, los huevos o los cacahuetes, hay otros alimentos que pueden causar reacciones alérgicas y que quizás no conocías.
Frutas rosáceas
Las frutas rosáceas, como el melocotón, la ciruela, y el albaricoque, son algunas de las frutas que pueden desencadenar reacciones alérgicas en muchas personas. Estas frutas pertenecen a la familia de las rosáceas, que también incluye a las fresas y las cerezas.
La razón detrás de las reacciones alérgicas a las frutas rosáceas se debe a las proteínas específicas que contienen. Cuando una persona alérgica consume estas frutas, su sistema inmunológico responde de manera exagerada, liberando histamina y provocando síntomas de alergia.
Los síntomas de una alergia a las frutas rosáceas pueden incluir:
- Picazón en la boca y la garganta.
- Urticaria o erupciones cutáneas.
- Inflamación de los labios, la cara o la lengua.
- Problemas gastrointestinales como vómitos o diarrea.
Para las personas alérgicas a estas frutas, la mejor forma de manejar la alergia es evitar el consumo de estas. Es importante leer las etiquetas de los productos alimenticios, ya que muchas veces estos ingredientes se utilizan en salsas y postres.
Mariscos
Los mariscos, que incluyen tanto los crustáceos como los moluscos, son otro grupo de alimentos que a menudo causan alergias. Aunque algunas personas pueden ser alérgicas a uno de los dos grupos, no necesariamente serán alérgicas al otro. Las proteínas presentes en los mariscos son las responsables de las reacciones alérgicas. Por ejemplo, la tropomiosina es una proteína en los crustáceos que puede provocar reacciones severas.
Los síntomas pueden variar, pero comúnmente incluyen:
Es crucial que las personas alérgicas a los mariscos eviten no solo el consumo de estos alimentos, sino también el contacto con ellos. La contaminación cruzada en la cocina puede ser un riesgo, por lo que se recomienda tener utensilios separados.
Soja
La soja es un alimento que se encuentra en muchos productos procesados y puede causar alergias en algunas personas, especialmente en niños. Esta legumbre es un ingrediente común en alimentos como la salsa de soya, tofu y productos vegetarianos. La alergia a la soja se produce cuando el sistema inmunológico reacciona a las proteínas de la soja. Esta reacción puede variar en severidad, desde síntomas leves hasta anafilaxia.
Los síntomas de la alergia a la soja pueden incluir:
- Urticaria y picazón.
- Problemas digestivos como diarrea.
- Dificultad para respirar y sibilancias.
- Reacciones cutáneas.
Para quienes son alérgicos a la soja, es fundamental leer las etiquetas de los productos alimenticios. La soja se utiliza en muchos alimentos procesados, por lo que es esencial estar alerta.
Apio
El apio es un vegetal que puede causar reacciones alérgicas en algunas personas, especialmente en aquellos que son alérgicos a las hierbas y especias. La alergia al apio es más común en Europa y puede estar relacionada con la polinosis, una reacción alérgica a los pólenes. Las proteínas del apio pueden desencadenar reacciones en personas sensibilizadas.
Los síntomas de la alergia al apio pueden incluir:
- Urticaria y picazón.
- Dificultades respiratorias.
- Síntomas gastrointestinales como vómitos.
Para evitar reacciones alérgicas, es recomendable que las personas alérgicas al apio eviten el consumo de este vegetal y estén atentas a los ingredientes en los platos preparados.
Gluten
El gluten es una proteína que se encuentra en el trigo, la cebada y el centeno. Aunque la enfermedad celíaca es una condición autoinmune, algunas personas pueden experimentar reacciones alérgicas al gluten. La alergia al gluten se produce cuando el sistema inmunológico reacciona a las proteínas del gluten. Esto puede llevar a una variedad de síntomas que afectan a diferentes sistemas del cuerpo.
Los síntomas pueden incluir:
- Dolor abdominal y distensión.
- Náuseas y vómitos.
- Problemas cutáneos como erupciones.
Para quienes son alérgicos al gluten, la única forma de evitar reacciones es eliminar completamente el gluten de su dieta. Esto incluye evitar productos que contengan trigo, cebada y centeno.