Redacción.- La atención oncológica en Haití enfrenta barreras significativas, desde limitaciones de infraestructura y servicios hasta la inseguridad alimentada por la violencia de pandillas, retrata el periódico haitiano Le Nouvelliste.
Los especialistas, como el Dr. Joseph Bernard Junior del Hospital Saint-François de Sales, destacan que la mayoría de los diagnósticos de cáncer, especialmente de mama, se realizan en etapas avanzadas debido a la falta de acceso a servicios de detección y diagnóstico temprano.
Las cifras recientes del Ministerio de Salud Pública y Población indican que el cáncer de mama es la principal causa oncológica en mujeres, con 353 casos reportados en 2022, seguido del cáncer de cuello uterino y de próstata. Sin embargo, el Observatorio Mundial del Cáncer muestra cifras mucho más altas, lo que resalta un subregistro preocupante.
Uno de los mayores problemas en la atención del cáncer es la falta de centros públicos de tratamiento. Desde el cierre del centro oncológico del Hospital General en 2020, el país cuenta solo con unos pocos centros privados, como el Instituto Haitiano de Diagnóstico Oncológico y la Clínica del Cáncer en Saint-François de Sales.
La radioterapia, fundamental en el tratamiento del cáncer, está prácticamente inaccesible en el país. Según el Dr. Dieusel Cantave, la Sociedad Haitiana de Oncología tenía acuerdos con Cuba y la República Dominicana para referir pacientes, pero los problemas de seguridad han dificultado estos traslados.
Los costos elevados y la falta de seguro médico también limitan el acceso. Menos del 8% de la población haitiana cuenta con seguro de salud, lo que significa que los tratamientos de cáncer deben ser financiados directamente por los pacientes, muchos de los cuales abandonan el tratamiento debido a la falta de recursos. Además, los medicamentos para el cáncer, como el Trastuzumab y la morfina, son difíciles de conseguir y costosos.
Los médicos también enfrentan barreras culturales en la lucha contra el cáncer. Muchos pacientes creen que el cáncer es una enfermedad incurable o de origen místico, lo que dificulta la aceptación del diagnóstico y tratamiento, especialmente en casos de mastectomía.
Para mejorar la atención, los especialistas han propuesto un Plan Nacional de Control del Cáncer, con un enfoque en la prevención y detección temprana, además de establecer un comité para adaptar las recomendaciones médicas a la realidad haitiana y expandir la red de centros de atención oncológica.