El Círculo de Mujeres con Discapacidad (CIMUDIS), Fòs Feminista, Women Enabled International y Women’s Link Worldwide, denunciaron que Flor, madre de la adolescente de 14 años con discapacidad abusada sexualmente y actualmente embarazada de su agresor, no le permiten ver a su hija.
Se trata de la joven Luz, quien padece de una discapacidad cognitiva severa, violentada sexualmente y con un embarazo de alto riesgo. Se encuentra en un hogar de paso desde el 31 de agosto.
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Las entidades califican de injustas las restricciones a la madre por parte de la Fiscalía, un juzgado y el Consejo Nacional para a Niñez y la Adolescencia (CONANI), los cuales determinaron que la menor estaba en riesgo y que debía ser institucionalizada.
“A Flor nunca le comunicaron a dónde llevarían su hija y, a pesar de que le dijeron que podría visitarla cuando quisiera, ese ofrecimiento no se cumplió. Flor no supo del paradero de su hija durante un mes”, expresó el comunicado.
Informaron que el Estado contactó a Flor y le permitió visitar a su hija el 30 de septiembre. Sin embargo, le informaron que para seguir viéndola necesitaría una autorización de la Fiscalía. Adicionalmente, en una audiencia realizada el 11 de octubre, se decidió que las visitas serán solo dos veces al mes.
Madre pide visitarla al menos una vez a la semana
“Quiero estar con mi hija, cuidarla y poder verla al menos una vez a la semana. También que se investigue la violencia sexual que sufrió y que esto no le vuelva a pasar a ninguna niña ni adolescente”, aseguró Flor.
Flor es una mujer que vive en condiciones de extrema pobreza. Por la situación que han vivido junto a su hija, el deseo de estar junto a ella y la presión por parte de diferentes autoridades no tuvo otra opción que aceptar este régimen de visitas.
Sobre el hecho
En julio de 2024, Flor notó una protuberancia en el abdomen de su hija y la llevó al hospital. Luego de realizarle algunos exámenes, el personal médico le confirmó que estaba embarazada.
La madre denunció la violación y la Fiscalía emitió una orden de captura en contra del presunto violador, su padrastro. Sin embargo, hasta la fecha se encuentra prófugo de la justicia.
“Uno de los médicos que atendió a Luz afirmó que, por su edad, su discapacidad y su bajo peso es más propensa a tener cuadros de preeclampsia, un parto prematuro y riesgo de desprendimiento de la placenta. A estos riesgos se suman las consecuencias para la salud mental y emocional de una adolescente cuya única opción es llevar a término un embarazo producto de una violación”, dice el comunicado.
Culpan al Estado
El grupo de entidades exigen al Estado dominicano eliminar las prácticas forzadas de institucionalización de niñas y adolescentes con discapacidad.
Informaron que según el Comité de los Derechos de las personas con discapacidad, la institucionalización no debe ser considerada como una forma de protección de las personas con discapacidad, pues constituye una forma de segregación.
“La historia de Luz demuestra la inexistencia de justicia reproductiva y la incongruencia del Estado dominicano que, por un lado, prohíbe el aborto en todas las circunstancias y, por otro, castiga a las niñas y adolescentes sobrevivientes de violencia sexual a vivir separadas de sus familias”, explicó Jovana Ríos Cisnero, directora ejecutiva de Women’s Link Worldwide.
Concluyen con la exigencia para el Estado dominicano de que se restablezca de inmediato los derechos de Luz; respetar los derechos y deseos de Flor para acompañar y cuidar de su hija sin restricciones y que, como mínimo, permita visitas permanentes.
Por: Yari Araujo