La Reforma Constitucional y la Reforma Fiscal que impulsa el presidente de la República, Luis Abinader, pondrá a prueba al gobernante Partido Revolucionario Moderno (PRM), con una amplia mayoría en el Congreso Nacional, ya que al ser aprobadas en lo adelante, se evidenciará si se hicieron por consenso o por imposición.
Ya los reclamos de imposición son escuchados en la Asamblea Nacional Revisora, con los partidos opositores, es decir, la Fuerza del Pueblo (FP) y el Partido de la Liberación Dominicana (PLD), acusando al oficialismo de utilizar su mayoría mecánica para imponer la reforma a la Carta Magna.
Por el lado de la reforma fiscal, ya esta semana el Ejecutivo depositó el proyecto de Ley de Modernización Fiscal, el cual ha encontrado el rechazo de diversos sectores, como el cine, la industria, el ron, el turismo, entre otros.
En los siguientes días se podrá observar si los legisladores del PRM aprueban la pieza a vapor, con su amplia mayoría en las dos cámaras legislativas, o escuchan a los sectores que se han opuesto al aumento de impuestos que supone este proyecto que impulsa el presidente Abinader.
El ministro de Hacienda, Jochi Vicente, aseguró que antes de someter el proyecto buscaron el consenso de todos los sectores impactados, asegurando que la reforma no es contra ningún sector.
El mismo presidente Abinader ha dicho en reiteradas ocasiones que, a pesar de que el PRM tiene mayoría absoluta en el Congreso Nacional, esta legislación se caracterizará por la búsqueda de consenso con todos los sectores de la sociedad y partidos políticos.
“Utilizaremos la más amplia mayoría congresual obtenida hasta ahora, no para servirnos de ella, sino para servir a la democracia y al pueblo dominicano. Así entiendo yo el ejercicio del poder y mi obligación con él”, dijo Abinader al asumir su segundo mandato.
Ya esta semana la Asamblea Nacional Revisora completó este martes en primera lectura la modificación de varios artículos de la Constitución de la República, entre estos, la unificación de las elecciones y disposiciones para impedir que los presidentes se mantengan en el poder más allá de dos períodos constitucionales.
Esta modificación, además, prohíbe que cualquier otro funcionario de elección popular pueda cambiar la Constitución a su conveniencia.
La Asamblea Nacional, dominada por el oficialista Partido Revolucionario Moderno (PRM), acogió que los comicios presidenciales, congresionales, municipales y parlamentarios de organismos internacionales se realicen el mismo día.