Andrés Iniesta, autor del gol que dio a España el Mundial de 2010 y que fue una de las piezas clave del éxito del tiki-taka en el Barcelona, anunció el martes su retirada del fútbol.
El centrocampista, de 40 años, pone fin a una exitosa carrera de 22 años que incluye dos Eurocopas y cuatro Ligas de Campeones.
“Nunca pensé que llegaría este día, nunca lo imaginé”, dijo un emocionado Iniesta en el acto realizado en el puerto de Barcelona. “Todas estas lágrimas que hemos echado durante todos estos días, son lágrimas de emoción de orgullo, no son lágrimas de tristeza”.
“Son (las) lágrimas de ese niño que tenía el sueño de ser futbolista y lo conseguí, lo conseguimos, después de muchísimo trabajo, de muchísimo sacrificio, de muchísimo esfuerzo y de nunca rendirse”, agregó.
Tras su salida del Barcelona en 2018, se marchó al Vissel Kobe de Japón. La última temporada la pasó en el Emirates de la Pro League emiratí.
Desde su debut en 2002, Iniesta vistió la camiseta del Barça en 674 partidos.
Conocido por su excepcional control del balón y por una capacidad de generar juego superior a la media, Iniesta ayudó a anclar el centro del campo azulgrana, en el que compartía protagonismo con Xavi Hernández y Sergio Busquets, con Lionel Messi en ataque. Ese equipo que brilló durante años con un estilo fascinante y eficaz basado en la posesión, conocido como el tiki-taka.
En el palmarés de Iniesta hay también nueve ligas españolas y seis Copas del Rey con el club catalán.
“Uno de los compañeros con más magia y de los que más disfruté jugando juntos”, dijo Messi en un mensaje sobre Iniesta en su cuenta de Instagram. “La pelota te va a extrañar y todos nosotros también. Te deseo lo mejor siempre, sos un fenómeno”.
Iniesta ayudó también a España a dominar el fútbol mundial con su coronación en las Euro de 2008 y 2012 y en el Mundial de Sudáfrica de 2010, donde firmó el tanto de la victoria en el minuto 116 de la prórroga de la final contra Holanda con un derechazo desde dentro del área.
En el acto de Barcelona, Iniesta estuvo arropado por su familia, además de por dirigentes del Barcelona y miembros actuales del equipo, como el entrenador, Hansi Flick.
El único trofeo que le faltó ganar fue el Balón de Oro. Muchos creen que debió ganar esa galardón 2010 tras ganar el Mundial, pero el mismo fue para Messi.
Iniesta sostuvo que el que tres jugadores del Barça lideraron la votación en 2010 fue lo que más valoró: “La imagen de Xavi, Leo y yo, los tres en el podio, es más grande que haberlo conseguido. Tres tíos de la casa, que estén en el podio del Balón de Oro, este es el premio de aquel día, no quién lo ganase.”
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