El reciente desmonte de una tarima en la Plaza de la Bandera ha generado polémica en la opinión pública dominicana. La ministra de Interior y Policía, Faride Raful, ha declarado a través de su cuenta de Twitter que el desmonte fue realizado por miembros de la Policía Nacional, quienes estaban cumpliendo con su deber al no contar la tarima con la debida autorización del Ayuntamiento del Distrito Nacional (ADN).
La controversia estalló luego de que Raful, a pesar de encontrarse fuera del país, fuera informada sobre la situación. Según sus palabras, al enterarse del desmonte, tomó la decisión de suspenderlo para preservar el clima de paz entre los manifestantes reunidos en la Plaza de la Bandera. En su comunicado, Raful subrayó que la tarima no tenía el permiso requerido por el ADN, lo que llevó a las autoridades a intervenir.
Estando fuera del país, he sido informada que miembros de la PN, cumpliendo su deber, procedieron al desmonte de una tarima que no contaba con la debida autorización del ADN. He instruido a suspender el desmonte, a los fines de preservar el clima de paz de los manifestantes…
— Faride Raful (@FarideRaful) October 5, 2024
Reacciones en las redes sociales
La declaración de Raful ha provocado reacciones mixtas, ya que, según el periodista Francisco Tavárez, parece contradictorio que Raful se autoproclame como la “salvadora” de la marcha tras ordenar la suspensión del desmonte de la tarima, mientras a su vez culpa a la alcaldesa Carolina Mejía y al ayuntamiento por la falta de autorización. Tavárez también cuestionó la responsabilidad del desmonte, insinuando que se trata de una muestra de desorganización y abuso de autoridad.