NUEVA YORK – Los Yankees enfrentan una difícil situación tras la fractura en el cuarto y quinto dedo de la mano derecha del inicialista Anthony Rizzo, quien fue golpeado por un lanzamiento en la derrota 9-4 ante los Piratas. El pelotero sufrió la lesión en la parte baja de la séptima entrada al recibir un bolazo del lanzador zurdo Ryan Borucki, lo que lo obligó a salir del juego tras mostrar señales claras de dolor.
A pesar de la gravedad de la fractura, el mánager de los Yankees, Aaron Boone, se mostró optimista respecto a una posible recuperación rápida de Rizzo. «No lo descarto por completo para la postemporada», declaró Boone. La decisión dependerá de la tolerancia al dolor del jugador, ya que la Serie Divisional de la Liga Americana (SDLA) está programada para comenzar el 5 de octubre en el Yankee Stadium.
Rizzo intentó continuar en el juego, pero no pudo ponerse el guante para regresar al campo en la siguiente entrada, lo que llevó a su reemplazo por Oswaldo Cabrera en la primera base. En caso de que Rizzo no esté disponible para la SDLA, Cabrera sería una opción en la inicial. Otra alternativa sería la promoción del novato Ben Rice, quien ha tenido un notable desempeño en Triple-A, con un promedio de .269, nueve jonrones y 23 carreras impulsadas en 19 juegos desde septiembre.
La situación es aún más incierta debido a la lesión en la cadera de DJ LeMahieu, quien continúa en la lista de lesionados. LeMahieu ha estado incrementando sus actividades de béisbol con la esperanza de estar disponible, pero no ha enfrentado pitcheo en vivo desde el 3 de septiembre, lo que complica su retorno para el inicio de la postemporada.
Los Yankees, que están buscando comenzar la SDLA con el pie derecho, enfrentan un reto significativo con la posible ausencia de Rizzo, pero el equipo confía en que sus jugadores podrán adaptarse a la situación y avanzar en su camino hacia el título.